Entrevista a Víctor Brossa para una tesis de investigación sobre arte y terapia
También se habla de los estados creativos más allá de cualquier disciplina artística y de como integrar la imaginación a nuestras vidas de forma constructiva.
El artista español aprovecha la entrevista para hacer una serie de relaciones habituales en su discurso de integración, en las que nos transmite las bases de lo que significa el proceso creativo consciente. Esperamos que disfrutéis de la entrevista que, aunque bastante extensa, no tiene desperdicio. Un fuerte abrazo:
Equipo de Galería la línea.
Entrevista para TESIS DE INVESTIGACIÓN SOBRE PINTURA Y TERAPIA DE SANACIÓN al artista Víctor Brossa:
+ Te he oído decir que en los estados creativos accedemos a nosotros mismo de forma natural ¿en qué sentido puede la pintura facilitar ese acceso?
VB - No se trata solamente de la pintura. El arte es nuestra expresión natural. Se trata de expresarse desde donde se da la integración en cada uno de nosotros, es decir, desde el corazón.
Entonces, cualquier expresión estará equilibrada y será un alimento perfecto para el alma. La retroalimentación es un concepto clave en el funcionamiento del Universo. Lo dicen científicos tan fascinantes e innovadores como Dan Winter, que nos habla de la fractalidad como fuente de toda vida. Sin fractalidad, no hay vida y la fractalidad necesita de la diversidad para existir.
Estamos unidos los unos a los otros y desde ahí co-creamos lo que llamamos "nuestra realidad", pero por otro lado, cada uno contiene una chispa única con todo el potencial, desde la que puede expresarse para generar una realidad propia que aportará riqueza a la colectiva.Por eso hablo de co-crear. Crear es expresarse, como cuando soltamos el aire para respirar. Luego volvemos a tomar aire, es decir, nos alimentamos de vuelta.
La creación nos nutre. Es una respiración a modo de danza. Nos alimentamos los unos a los otros de lo que expresamos hacia afuera, es decir, de nuestras propias creaciones conscientes e inconscientes. Insuflamos los recuerdos que generamos al soñar dormidos o despiertos. La creatividad es una capacidad nuestra, un mecanismo que va unido a nuestro poder y libertad, y podemos ser creativos desde muchos estados de conciencia.
Dependiendo de la frecuencia en la que nos sintonicemos, nuestras obras emanarán de una forma u otra. Ese será el alimento que nos impulsará hacia el recuerdo o nos seguirá hundiendo en nuestra propia negación, como ocurre con la mayor parte del arte que se promueve de hoy en día desde los que manejan el poder mundial y un sistema antifractal.
Pintar es una forma de conectarse a estados creativos y a uno mismo, pero actualmente se ha perdido la memoria de lo que significa el arte y se potencia un arte frío, distante, cerebral o se va al otro extremo, al arte que nos enferma porque se alimenta de nuestras neurosis. Sea como sea, se promueve un arte que se aparta de su sentido más esencial.
Un ejemplo de eso es el modelo de artista que se nos ha intentado inculcar y vender desde el inicio del arte moderno. O es un loco y un excéntrico, o un ser incomprendido e infelizmente apasionado.
También está el nuevo artista, más parecido a un publicista o a un agente de bolsa. Hay un interés por apartar al artista de su verdadera función de chamán, de un ser conectado a su esencia. Se nos vende desesperación o racionalidad, pero amor y sentimiento equilibrados no parecen estar de moda aunque a nivel superficial se nos venda espiritualidad en el arte.
Todo el mundo parece haber olvidado que un artista es un mago, y todos somos artistas aunque no pintemos. Todo empieza aquí. No hay exclusividad en esto. Todos somos artistas y todos podemos crear y de hecho lo hacemos cada día. Co-creamos nuestra realidad todos juntos aunque sea de manera inconsciente.
Lo dice la física cuántica. Nuestro pensamiento es creador. El asunto es que creamos desde frecuencias de olvido y desconexión al recuerdo de quienes somos. Se trata entonces de recordarnos y crear desde esa frecuencia de amor a la que accedemos si vamos al corazón. RECORDAR significa literalmente eso (re cordis = volver al corazón)
+ Has definido la pintura como un camino para llegar al verdadero ser ¿Qué te ha aportado la pintura en tu búsqueda hacia llegar a tu sencia?
VB – La pintura te permite rescatar información porque es muy libre, pero he navegado muchos años en la sombra y la desesperación al no darme cuenta que reproducía patrones y arquetipos destructivos al pintar. Creaba desde la huida.
Estamos acostumbrados a soñar para escapar de un mundo que no nos gusta y que nos sentimos incapaces de poder transformar. Y al huir no pintaba tan siquiera el mundo que me hubiera gustado encontrar, sino más bien la desesperación que sentía y todos sus demonios. Me alimenté muchos años así hasta que llegué a las profundidades.
Entonces me di cuenta que podía dejar de lamentarme y hacer algo por mí. Amarme significó recordar el poder creador que tenemos todos y empezar a usarlo para transformar mi realidad a través del arte, de mi expresión. Entonces comencé a usar la imaginación para integrar y encarnar todo aquello que yo deseara vivi en esta realidad. Pintarlo empezó a ser una ayuda.
También empecé a pintar para rescatar información que me ayudara a crecer e incluso pintaba cuadros para reprogramar mi vida. Programo conscientemente cada pintura para que el que la vea sienta su propio corazón latiendo de nuevo. Acepté hacer posible lo ideal e integrarlo a mi realidad. Acepté el arte como una verdadera medicina para el alma.
+ ¿Cómo explicarías el proceso creativo dentro de un contexto de desarrollo humano?
VB – Bueno, estamos atrapados al miedo y a estados de supervivencia precisamente por esa ausencia de memoria.
Los estados creativos liberan, se cargan cualquier programa sobre todo en el caso de expresarse desde el corazón. Es lo que hacen los niños. No juzgan porque sienten la integración del ying y el yang en perfecto equilibrio.
Por eso no se les puede programar hasta que van aceptando nuestro chantaje emocional y hasta que sienten la necesidad de sentirse aceptados, sentirse parte del sistema, de la manada, de esta realidad que forma parte de sus vidas al haber encarnado.
El arte sirve para recordarnos lo sagrados que somos. Lo que comemos y el lugar en el que lo hacemos, las ropas que vestimos, los objetos que usamos, el lugar en el que vivimos. Todo debería irradiar vida y recordarnos quienes somos realmente. Esa es la función del arte.
De ahí viene la palabra ARTESANO. El artesano era el chamán, el artista que creaba alimento sano para la vista, para los sentidos, para una limpieza de pensamiento y emociones. Necesitamos un arte sano para vivir saludables a todos los niveles.
Por eso el arte solo puede venir del corazón si lo que queremos es dejar de vivir en la amnesia. Los procesos creativos pueden acercarte a eso y desprogramar todo aquello que se ha ido instalando en el disco duro que llevas en el inconsciente. Ordenes genéticas, energéticas, emocionales. Desde que nacemos heredamos programaciones que limitan nuestra expresión.
VB - No se trata solamente de la pintura. El arte es nuestra expresión natural. Se trata de expresarse desde donde se da la integración en cada uno de nosotros, es decir, desde el corazón.
Entonces, cualquier expresión estará equilibrada y será un alimento perfecto para el alma. La retroalimentación es un concepto clave en el funcionamiento del Universo. Lo dicen científicos tan fascinantes e innovadores como Dan Winter, que nos habla de la fractalidad como fuente de toda vida. Sin fractalidad, no hay vida y la fractalidad necesita de la diversidad para existir.
Estamos unidos los unos a los otros y desde ahí co-creamos lo que llamamos "nuestra realidad", pero por otro lado, cada uno contiene una chispa única con todo el potencial, desde la que puede expresarse para generar una realidad propia que aportará riqueza a la colectiva.Por eso hablo de co-crear. Crear es expresarse, como cuando soltamos el aire para respirar. Luego volvemos a tomar aire, es decir, nos alimentamos de vuelta.
La creación nos nutre. Es una respiración a modo de danza. Nos alimentamos los unos a los otros de lo que expresamos hacia afuera, es decir, de nuestras propias creaciones conscientes e inconscientes. Insuflamos los recuerdos que generamos al soñar dormidos o despiertos. La creatividad es una capacidad nuestra, un mecanismo que va unido a nuestro poder y libertad, y podemos ser creativos desde muchos estados de conciencia.
Dependiendo de la frecuencia en la que nos sintonicemos, nuestras obras emanarán de una forma u otra. Ese será el alimento que nos impulsará hacia el recuerdo o nos seguirá hundiendo en nuestra propia negación, como ocurre con la mayor parte del arte que se promueve de hoy en día desde los que manejan el poder mundial y un sistema antifractal.
Pintar es una forma de conectarse a estados creativos y a uno mismo, pero actualmente se ha perdido la memoria de lo que significa el arte y se potencia un arte frío, distante, cerebral o se va al otro extremo, al arte que nos enferma porque se alimenta de nuestras neurosis. Sea como sea, se promueve un arte que se aparta de su sentido más esencial.
Un ejemplo de eso es el modelo de artista que se nos ha intentado inculcar y vender desde el inicio del arte moderno. O es un loco y un excéntrico, o un ser incomprendido e infelizmente apasionado.
También está el nuevo artista, más parecido a un publicista o a un agente de bolsa. Hay un interés por apartar al artista de su verdadera función de chamán, de un ser conectado a su esencia. Se nos vende desesperación o racionalidad, pero amor y sentimiento equilibrados no parecen estar de moda aunque a nivel superficial se nos venda espiritualidad en el arte.
Todo el mundo parece haber olvidado que un artista es un mago, y todos somos artistas aunque no pintemos. Todo empieza aquí. No hay exclusividad en esto. Todos somos artistas y todos podemos crear y de hecho lo hacemos cada día. Co-creamos nuestra realidad todos juntos aunque sea de manera inconsciente.
Lo dice la física cuántica. Nuestro pensamiento es creador. El asunto es que creamos desde frecuencias de olvido y desconexión al recuerdo de quienes somos. Se trata entonces de recordarnos y crear desde esa frecuencia de amor a la que accedemos si vamos al corazón. RECORDAR significa literalmente eso (re cordis = volver al corazón)
+ Has definido la pintura como un camino para llegar al verdadero ser ¿Qué te ha aportado la pintura en tu búsqueda hacia llegar a tu sencia?
VB – La pintura te permite rescatar información porque es muy libre, pero he navegado muchos años en la sombra y la desesperación al no darme cuenta que reproducía patrones y arquetipos destructivos al pintar. Creaba desde la huida.
Estamos acostumbrados a soñar para escapar de un mundo que no nos gusta y que nos sentimos incapaces de poder transformar. Y al huir no pintaba tan siquiera el mundo que me hubiera gustado encontrar, sino más bien la desesperación que sentía y todos sus demonios. Me alimenté muchos años así hasta que llegué a las profundidades.
Entonces me di cuenta que podía dejar de lamentarme y hacer algo por mí. Amarme significó recordar el poder creador que tenemos todos y empezar a usarlo para transformar mi realidad a través del arte, de mi expresión. Entonces comencé a usar la imaginación para integrar y encarnar todo aquello que yo deseara vivi en esta realidad. Pintarlo empezó a ser una ayuda.
También empecé a pintar para rescatar información que me ayudara a crecer e incluso pintaba cuadros para reprogramar mi vida. Programo conscientemente cada pintura para que el que la vea sienta su propio corazón latiendo de nuevo. Acepté hacer posible lo ideal e integrarlo a mi realidad. Acepté el arte como una verdadera medicina para el alma.
+ ¿Cómo explicarías el proceso creativo dentro de un contexto de desarrollo humano?
VB – Bueno, estamos atrapados al miedo y a estados de supervivencia precisamente por esa ausencia de memoria.
Los estados creativos liberan, se cargan cualquier programa sobre todo en el caso de expresarse desde el corazón. Es lo que hacen los niños. No juzgan porque sienten la integración del ying y el yang en perfecto equilibrio.
Por eso no se les puede programar hasta que van aceptando nuestro chantaje emocional y hasta que sienten la necesidad de sentirse aceptados, sentirse parte del sistema, de la manada, de esta realidad que forma parte de sus vidas al haber encarnado.
El arte sirve para recordarnos lo sagrados que somos. Lo que comemos y el lugar en el que lo hacemos, las ropas que vestimos, los objetos que usamos, el lugar en el que vivimos. Todo debería irradiar vida y recordarnos quienes somos realmente. Esa es la función del arte.
De ahí viene la palabra ARTESANO. El artesano era el chamán, el artista que creaba alimento sano para la vista, para los sentidos, para una limpieza de pensamiento y emociones. Necesitamos un arte sano para vivir saludables a todos los niveles.
Por eso el arte solo puede venir del corazón si lo que queremos es dejar de vivir en la amnesia. Los procesos creativos pueden acercarte a eso y desprogramar todo aquello que se ha ido instalando en el disco duro que llevas en el inconsciente. Ordenes genéticas, energéticas, emocionales. Desde que nacemos heredamos programaciones que limitan nuestra expresión.
+ ¿Qué es lo que la pintura te ha permitido descubrir respecto a ti mismo?
VB - La pintura ha sido la cuerda a la que me agarré cuando la vida no me interesaba, pero eso tampoco me llevó a ninguna parte.. Desde allí solo alimenté al ego. Eso si, le encontré un sentido a mi vida. El problema es que no era suficiente. No fue la pintura sino yo mismo el que un día escogí atreverme a ser yo.
Al menos tomar ese camino, lo que Juan Matus llamaba en los libros de Castaneda el camino del corazón. A partir de ahí la pintura se convirtió en una herramienta más para acercarme a mi esencia.
+ ¿Y qué te ha permitido descubrir respecto a los otros?
VB – Todos somos espejos. Me gusta imaginar que eso que llamamos Dios se experimenta y expresa desde todas sus caras y estados de conciencia. Cada uno de nosotros somos una cara de Dios brillando.
+ ¿Qué relación hay entre pintura y meditación?
VB – Mucha, si entendemos que meditar es volver al centro, a uno mismo. Pero una vez más hay que distinguir entre la esencia de uno y las múltiples caras que tenemos desde el ego, lo mismo que entre los variados estados de conciencia y vibración en los que nos movemos.
Si mi frecuencia al pintar sintoniza con la de la rabia y el odio no estaré en el corazón, por tanto estaré poco en mi esencia. Eso no significa que no pueda expresar genialidad e innovación o que la calidad de lo que haga no tenga un gran nivel. Lo que ocurre es que el resultado me nutrirá en la frecuencia emitida y eso es algo que deberé escoger vivir o no en función de lo que yo mismo desee.
Tampoco se trata de que el arte sea todo pintar flores y cielos azules. Se trata de intento y frecuencia más que de cualquier otra cosa. Yo puedo expresar dolor o sufrimiento desde una frecuencia de amor. Suena confuso pero es fácil en realidad. Se trata de eliminar el juicio y dejarse ser.
+ ¿Cómo nos podría ayudar, si es que lo puede hacer, la pintura a encontrar nuestro centro?
VB – Pues yo recomiendo divertirse y experimentar esa libertad de ser sin miedo al fracaso, porque el peor juez somos nosotros mismos. Todos podemos tomar un pincel y jugar. No hay niño que no se atreva a hacerlo. Los juicios internos o externos son los que coartan nuestra libertad de expresión.
Eso es muy sanador. Otra cosa que recomiendo es cerrar los ojos y visualizar el corazón, sentir como late lleno de luz y simplemente abrir los ojos y hacer con el pincel lo que te plazca sin buscar resultados. El puro placer de la expresión sin retos, sin objetivos. Vivimos en una sociedad en la que lo que no es aparentemente productivo no vale.
+ Continuando con lo anterior ¿has tenido alguna experiencia así? Si le respuesta es sí ¿puedes describir como fue?
VB – Supongo que te refieres a si he tenido una experiencia de ir a mi centro con la pintura. Claro que si. Todos los días en los que pinto, salvo cuando me emperro en usar la mente y en ponerme presión u objetivos. Ahí se rompe la magia. Empieza la lucha por demostrarme lo que soy capaz de hacer y la frustración aflora al ver que no soy Velázquez. Me exijo lo más difícil y me olvido de ser yo, que es lo fácil. Entonces pierdo el centro. Muchos creen que la pintura es espiritual.
Todo es espiritual en realidad. Yo puedo perder mi centro pintando o reencontrarlo, lo mismo que haciendo cualquier cosa, incluso viendo un partido de fútbol. Siempre depende de mí y del estado de conciencia en el que estoy escogiendo expresarme, aun cuando lo escoja desde el inconsciente. Creemos que no escogemos cuando en realidad lo hacemos todo el tiempo de manera inconsciente. Nadie está donde no desea. Otra cosa es que nuestra parte consciente se haya enterado.
+ En tu film "Devolver el arte a su lugar sagrado" dices que la vida es un camino hacia uno mismo ¿en que nos podemos valer de la pintura para andar dicho camino?
VB – La vida bajo mi punto de vista es una experiencia elegida. La pintura me ayuda ahora a caminar más consciente. Hubo un tiempo en que me ayudó a seguir perdido. Una vez más, es uno mismo el que siempre elije. Ahora soy soberano porque acepto abrazar el poder que tenemos para ser los magos conscientes de nuestra creación.
Ya no quiero quejarme. Tampoco luchar y desgastarme de forma absurda. Pelear contra uno mismo es algo que aparto para abrazarme y focalizarme en contribuir a crear el mundo que deseo vivir y respirar. Lo pinto, lo huelo, lo veo y lo respiro cada día. Lo integro a nuestra realidad. Para eso me sirve ahora el arte. No es que me escape a soñar. Lo que me ocurre es que ya vivo día a día parte de esa realidad haciendo cualquier cosa. Sueño e integro en cada pequeña cosa la esencia de lo que siento y deseo.
+ ¿Que ha supuesto la pintura en tu vida?
VB – La pintura me ayudó a seguir viviendo cuando me refugié en ella porque no me interesaba la vida, la pintura me mantuvo en el limbo cuando creí que podía ser lo que daba sentido a mi vida, la pintura alimentó mi ego cuando creí que podía ser alguien mejor que el resto, y la pintura me ayudó y ayuda a volver a mi centro cuando ahora creo, porque lo hago desde el corazón.
+ Vamos a situarnos en momentos de pintura, ¿Cuáles son las sensaciones que te produce pintar?
VB – Pintar lo relaciono en mi caso con un cúmulo de sensaciones, pero también me ocurre cuando pienso en caminar, escribir lo que siento, reir, compartir con alguien, etc. El disfrutar de cualquier cosa desde el corazón hace que eso sea así, no el pintar en sí mismo.
Desde la conciencia de ser todo es fácil. Nuestro problema es que nos olvidamos de vivir desde el AHORA.
+ Me gustaría que nos hablaras de AMOR, según tu experiencia ¿que ofrece el AMOR al proceso creativo a través de la pintura?
VB – Como ya te comentaba, el amor es la clave para todo, y crear desde otro lugar a mi al menos ya no me interesa. AMOR es una palabra que se usa para muchas cosas y que se interpreta de una forma muy limitada.
Cuando oímos amor nos vamos a procesar desde las programaciones que hemos recibido desde la religión, los libros y canciones, la tele o el cine sobre lo que se nos ha querido vender y relacionar con formas de ser y vivir el amor. AMOR para mí es energía pura de expresión y activación.
Amor significa integración y aceptación y lo primero que podemos preguntarnos es si nos amamos a nosotros mismos, si nos aceptamos y si lo que juzgamos afuera no es parte de lo que proyectamos desde donde no queremos admitir la sobra que también nos acompaña. Podríamos escribir un libro entero sobre qué es el amor.
+ ¿Qué me dirías sobre la pintura como un medio para llegar a transformar nuestra vida?
VB – Una vez más, no es la pintura sino uno mismo. El pincel es una ayuda, una herramienta que puede usarse para muchas cosas. Un cuchillo en manos de un asesino es algo muy distinto que en manos de un cocinero. Todo puede ayudarte a recordar y a transformar tu vida.
Para eso se necesita recordar desde la conciencia. Justamente conciencia significa la “reunión de las ciencias y el saber”, pero lo que muchos no saben es que fue una traducción de la palabra griega syneidesis, que significa “con capacidad de imaginar”.
Tal vez más que en la pintura, es en la imaginación donde están las respuestas. Nuestra capacidad de imaginar es la vía hacia el recuerdo de quienes somos.
Somos creadores e imaginar es el poder que tenemos para poder integrar a nuestra realidad lo que deseemos. Pintar es algo que puede ayudar a hacérnoslo más fácil.
+ ¿Cómo dirías que esto ocurre?
VB - ¿Cómo transforma la pintura nuestras vidas? Pues apoyando lo que queremos crear o recordar. Las imágenes fuerza ayudan a materializar. Por eso en Egipto se escribía y pintaba todo en todas partes. El inconsciente era programado para recordar desde la materia.
Los que están arriba manejando este mundo que nos hemos acostumbrado a aceptar como el único posible saben de eso, por eso los reyes siempre se han hecho retratos gloriosos. Tienen poder porque se lo cedemos nosotros de forma inconsciente principalmente. Si convences a una masa crítica puedes hacer realidad un sueño muy grande. Las imágenes, igual que las palabras, tienen mucho poder a diferentes niveles.
El consenso es necesario porque estamos unidos por la gravedad y co-creamos todos juntos. Por eso se habla siempre al inconsciente cuando se nos intenta convencer de algo, cuando se nos quiere vender una idea o un producto. En nuestro inconsciente colectivo se genera el peso de la creación de nuestra realidad.
El inconsciente entiende de arquetipos, colores, sensaciones, números, etc. Y acepta todo aquello que se le cuenta como si se tratara de un niño de 4 años. Así funciona. Yo doy talleres para recordar como funciona eso y también para integrar la visualización y la imaginación como herramientas de transformación de lo que llamamos nuestras vidas. Se puede cambiar nuestro día a día visualizando.
+ ¿Cómo se crea con pintura y un lienzo?
VB – Como de cualquier otra forma. Queriendo. Un sabio se moría y todos sus discípulos le pidieron que les dejara un último mensaje. El solo dijo: - Cuando bebo, bebo. Cuando como, como. Cuando me muero, me muero -. Y se murió. Solo puedo decirte una cosa al respecto de tu pregunta entonces: Cuando pinto, pinto.
+ Pasemos a la obra, una vez realizada ¿qué es lo que la obra muestra de ti?
VB – A veces no lo se ni yo. Hay un proceso de creación y otro posterior de sorpresa. El inconsciente manda muchos mensajes. Si no fuera así sería aburrido. Eso pasa con el arte racional y metódico que nos intentan vender desde muchas partes. No tiene chispa.
+ Y para terminar ¿ hay alguna otra pregunta que desearías responder y no esté expuesta anteriormente?, por favor escribe la pregunta y la respuesta.
VB – Bueno, me gustaría decir que si todos deseamos ser nosotros mismos, eso solo podemos hacerlo una vez más desde el corazón. Desde allí solo nos queda expresarnos. Eso hace el sol, brillar. Somos artistas aunque no pintemos. Cuando vamos al corazón somos soles que brillan para sí y para los demás.
Uno es artista jugando con su hijo, barriendo una habitación o simplemente respirando y observando. Se trata de saberlo y pintar tu vida cada día desde cada acto y pensamiento consciente, desde cada momento, aquí y ahora, desde la conciencia de amor. Eso es devolver el arte a su lugar sagrado.
Uno es artista jugando con su hijo, barriendo una habitación o simplemente respirando y observando. Se trata de saberlo y pintar tu vida cada día desde cada acto y pensamiento consciente, desde cada momento, aquí y ahora, desde la conciencia de amor. Eso es devolver el arte a su lugar sagrado.
+ Una última valoración o apreciación.
VB – Podemos crear el mundo que deseamos desde el ideal que vive dentro de lo más esencial de nosotros mismos, y lo podemos hacer desde el convencimiento en el poder que juntos, desde la chispa de la diversidad, todos tenemos. No hace falta hacer mucho. Solamente soñar sin huir. Soñar para integrar, creyendo que es posible que ocurra.
Soñar desde lo más pequeño hacia lo más grande, cada día, en cada momento, por muy insignificante que nos parezca. Cada gesto, cada emoción, cada pensamiento están construyendo nuestro futuro. Nosotros podemos elegir lo que queremos vivir. Somos ARTISTAS CÓSMICOS.
Un fuerte abrazo a todos.
Víctor Brossa, 21/02/2012
MAS INFO:
http://buenasiembra.com.ar/arte/articulos/victor-brossa-el-arte-como-camino-iniciatico-1377.html
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