DINERO Y ESPIRITUALIDAD
Durante varios años se ha creado la controversia entre tener dinero y ser espiritual.
Hemos pasado por distintas corrientes del pensamiento, dogmas, sistemas y procesos que tratan de una u otra manera de “satanizar” el dinero en aras de tener una vida más espiritual.
Vemos que en pro de una vida espiritual hay gente que no trabaja, y deja que otros los mantengan.
Otros menos descarados se ocupan consciente o inconscientemente de mantenerse en un estado de escasez para no perder lo que consideran “la comunicación con Dios”.
Otros predican lo malo que es el dinero mientras ellos mismos se proveen de dinero a manos llenas con medios legítimos o ilegítimos.
El Dinero es una manifestación de nuestro derecho a estar en el planeta. Tenemos derecho a Ser y a Tener. Ambos son pilares del ciclo evolutivo que nos toca vivir acá.
La mente, el dinero, la espiritualidad y el libro albedrío deben estar en consonancia para proveernos una vida llena de bienestar.
Reprogramando nuestro sistema de creencias logramos conseguir una vida estable y próspera acorde a lo que como seres humanos dignos nos merecemos.
Algunos rituales que se hacen para alcanzar mejores niveles de prosperidad funcionan en el momento y por un tiempo limitado ya que generalmente no ha habido un trabajo interno que elimine el bloqueo energético y mental grabado en nuestros chacras y centros de energía.
Podemos hacer rituales sin olvidar que somos responsables por el resto de nuestras vidas y no solo por pequeños periodos de tiempo donde conseguimos logros temporales que no perduran porque no tienen el verdadero sustento interior.
Bendiciones y Abrazo de Luz.
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