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miércoles, 17 de agosto de 2011

Los Hombres del Espíritu ven,,,




Los hombres del espíritu ven a su prójimo animal


Los hombres del espíritu ven en los animales a su prójimo animal

También los animales tienen su mundo de sensaciones de acuerdo con su desarrollo y su consciencia. El hombre lo llama instinto.

Puesto que los animales perciben y actúan instintivamente, también sienten miedo y angustia cuando los hombres los tratan brutal y cruelmente.

Las formas materiales son la fuerza del Creador manifestada.

Cada animal es entonces, como cada forma de vida, representación de la fuerza creativa manifestada, una parte del Logos divino.

El que actúa en contra de las formas de vida, actúa en contra de sí mismo.

El alma en cada hombre, llamada ser espiritual en tanto es pura, posee todas las fuerzas, todos los ámbitos de la consciencia eterna, también los aspectos de la consciencia de los minerales, plantas y animales.

Por ello, quien actúa contra la naturaleza, quien trata a los animales con violencia, carga su alma, y así construye su propio destino.

Si el hombre prefiere el alimento de carne o pescado, o basa su alimentación en ellos, colabora a que se mate a los animales con el fin de producir carne.

Por ello carga su alma de igual manera que aquellos que matan a los animales para tales fines u otros, por ejemplo, para experimentar con ellos.

El cuerpo espiritual es la Ley, es Dios. Está compuesto de la esencia de todas las formas de vida.

El cuerpo de un ser espiritual está constituido, por tanto, de todas las energías de consciencia, las de los minerales, plantas y animales; también la esencia de los astros es parte del cuerpo espiritual.

Todo lo que vive tiene su origen en Dios, es divino.

Lo divino es vida, y la vida está en el hombre; así todo lo que vive está como esencia en él.


Estracto de: Lo que piensas y hablas, tu forma de comer y lo que comes, muestra quién eres.

La palabra de Dios para nosotros manifestada por el Querubín de la Sabiduría divina, el hermano Emanuel.

Dada a través de la profetisa del Señor, Gabriele de Würzburg


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